El paisaje de Estremera va cambiando año tras año, los agricultores de regadío se encargan de ello.Las alteraciones dieron comienzo cuando los regantes del Canal de Estremera decidieron vender a los agricultores murcianos toda su dotación de agua ( 31,05 hectómetros cúbicos) en medio una gran sequía y de fuertes criticas, justificando la acción en el deterioro de las canales de riego y en la redacción y ejecución de un moderno sistema de regadío.La comunidad de regantes del canal de Estremera halló una formula temporal de ingresar anualmente más de 5 millones de euros a fin de compensar las pérdidas derivadas de las obras del nuevo sistema de regadío, y lo que en un principio iba durar dos años lleva camino de convertirse en una permanente fuente de ingresos, aunque cierto es , se redactó y aprobó un caro proyecto.
Las costosas obras (15 MM de euros) fueron adjudicadas a la UTE Befesa-Abengoa y dieron comienzo con el desmantelamiento de las viejas instalaciones dando la impresión, a quien los viera trabajar, de una gran cualificación profesional; no había más que fijarse en aquellos operarios vestidos con blancos trajes especiales para el desarrollo de su trabajo. ¡Puro espejismo! Viéndolos en medio de las tierras y en la distancia; hasta organizados parecían, pero una vez que se aproximaron a nuestras parcelas demostraron su autentica profesionalidad: ¡Entraron como un elefante en una cacharrería! Grandes e inapropiadas maquinas se abrieron paso por los caminos sin pensar en los que por ellos transitamos. Ignorando a los que aquí vivimos o considerándonos ciudadanos de inferior categoría; abren zanjas, cortan caminos, rompen instalaciones, vallas de cerramiento de parcelas, enlodan y enfangan entradas y salidas privadas.
La organización en la ejecución de las obras brilla por su ausencia: van y vuelven a actuar en la misma zona sin orden ni concierto; abren aquí, tapan allá, hoy empiezan una tarea y sin acabar otra. Zanjas abiertas, tierras amontonadas, vecinos descontentos y sin ser atendidos en sus reclamaciones y un sin fin de problemas, todos evitables, cercan a los vecinos de Peña Rubia.
¿Es así la manera de actuar de Befesa-Abengoa?
Todo parece indicar que si y que a nosotros nos toca la peor parte, nos tratan como si no existiéramos o que no tuviéramos derechos, como si en medio del campo trabajaran.¡Que vergüenza!
Y
eso que “aquellos operarios vestidos con blancos trajes especiales” aún no han empezado a desmontar las canales que cruzan nuestra urbanización.La verdad es que hay muchas preguntas que hacerse. Hoy solo preguntamos a nuestro Ayuntamiento, si va a seguir consintiendo que Befesa-Abengoa haga lo que le venga en gana en los caminos que usan los vecinos y sin tomará medidas.
¿Tendremos que esperar el tiempo que ellos quieran sin poder acceder a nuestras casas hasta que ellos decidan repararlos los camino que asolaron?
No andamos dispuestos a quedarnos parados. Ya iremos informando; de momento acordaros que estamos citados el próximo día 17 de Abril a las 10, 30 en primera convocatoria y a las 11,00 en segunda para nuestra Asamblea General Anual
